Nosotros, los descendientes de inmigrantes a los Estados Unidos, solemos mirar Europa con el comentario que allí "tienen TANTA historia", como si nosotros no la tuviéramos, como si no nos consideráramos parte también de un largo linaje que simplemente saltó el océano cuando las circunstancias hicieron necesaria la salida de las tierras de donde venimos. Los que somos desciendientes de los primeros habitantes de las Américas, y los que somos descendientes de la gente africana decimos que no sabemos nuestra historia en la misma manera que los europeos saben la suya, aunque por supuesto existe esta historia aun cuando no está escrita. El hecho es que, por supuesto, todos contamos con una rica e interesante historia. Pero también es verdad que para nosotros, los sucesos históricos de España -- con sus múltiples invasiones, muchas civilizaciones sucesivas y tantas fechas claves -- son difíciles de aprender y comprender precisamente porque no estamos acostumbrados a pensar en términos tan comprensivos. Pero vamos a hacer el esfuerzo. Valdrá la pena.

El carácter de un pueblo se forma y se manifiesta en la historia. Para muchos la historia determina de una manera definitiva el presente. Es así en España, un país también formado por olas de inmigración. Por ejemplo, los sevillanos sólo tienen que excavar un poco en la tierra alrededor de sus casas para encontrar la evidencia del dominio del imperio romano en la penísula, hace más de 2000 años -- encuentran monedas con la imagen del emperador todavía impresa en ellas, entre muchos otros artefactos. La historia en España es una realidad viva y los españoles están siempre muy conscientes del pasado.

En muchos aspectos la historia de España está relacionada con la historia de toda Europa, especialmente durante la época en que la Iglesia Católica tenía mucha influencia en la política. Pero en otros aspectos la historia española es única, y aun si hemos estudiado mucho sobre Francia o Alemania o el resto de Europa, es posible que no entendamos todo lo que hay que entender sobre el pasado español. Aunque vamos a aprender mucho más sobre todo esto en España misma, repasaremos brevemente lo más importante ahora.

Con su situación tan cerca de África, y con mucho de la península bajo el dominio de la civilización árabe, España servía durante la Edad Media como el eslabón entre el Oriente y el Occidente. Filósofos, matemáticos, lingüistas, y médicos viajaban allí desde los lugares más remotos del mundo para estudiar y conversar en los salones de los grandes sabios españoles. Cristianos, judíos, y árabes colaboraban en grandes proyectos intelectuales que influían en la arquitectura, la medicina, y la comunicación. Todo esto se debía en parte al hecho que España era casi una isla, vulnerable siempre a la invasión de poderes extranjeros. Y ha habido muchas invasiones, muchas olas de gente nueva, ideas nuevas, y cambios en la civilización. Los árabes eran sólamente unos cuantos en una cadena larga. Vamos a mirar rápidamente esta cadena, comenzando al principio de la historia conocida.

Antes de los romanos....

Los iberos son los primeros habitantes de la Península Ibérica de que tenemos conocimiento. Estaban allí por lo menos en el siglo VI a. C. pero seguramente existían allí desde mucho antes. Algunos científicos creen que los iberos son los antepasados de los vascos, pero hasta ahora no se ha comprobado esta conexión. Según los antropólogos, los iberos eran grandes guerreros, muy independientes y fuertes, con gran sentido de fidelidad hacia el líder del grupo. Los iberos usaban una forma de escritura, y tenían una religión basada en un dios de la guerra (un dios masculino), y una diosa femenina de la fecundidad, la vida, y la muerte. Habitaban principalmente en las costas de la península.

Si los iberos eran las primeras personas con civilización reconocida, también hay evidencia de otros seres humanos que dejaron restos mucho tiempo antes que ellos. En Orce, Granada, se encontraron los restos más antiguos (1.3 millones de años) de homo erectus y después se encontraron restos en Burgos que tienen 300.000 años de antigüedad. Se ha descubierto mucho arte paleolítico en cuevas y al lado de los viejos ríos. Evidencia de arte mesolítico, neolítico y de otras culturas comprueba una habitación contínua en Iberia desde entonces.

Los celtas llegaron de la parte norteña y céntrica de Europa al norte de Iberia en el siglo VI a. C. y existían al mismo tiempo con los iberos, eventualmente uniéndose con ellos. Se nota la influencia de los celtas todavía, especialmente en Galicia.

Mientras tanto, en el sur de la península, los fenicios comerciaban con la gente de la costa. Estos fenicios eran del lado oriental del Mediterráneo, y fundaron la ciudad de Cádiz en el año 1100 a. C. Se especializaban en el comercio del estaño, un mineral que se encontraba en el sur. Luego, los griegos establecieron relaciones comerciales, buscando el olivo y la uva. Los dos pueblos les trajeron enseñanza a los residentes nativos. Enseñaron el uso del alfabeto, el arte del tejido, el arte de trabajar los metales. Fundaron escuelas y otros institutos de aprendizaje. Fundaron algunas ciudades en el este y el sur, pero no tenían mucho interés en dominar el interior de la península hasta que en el siglo VI a. C. una facción de la civilización fenicia, los cartagineses de Cartago (en el norte de África), entró en un conflicto militar en la costa de España para ayudar a sus hermanos fenicios que ya vivían allí y consiguió desplazar tanto a ellos como a los enemigos de ellos. Así tomaron posesión de mucho de la península.

Pero los romanos tenían interés en las riquezas minerales y agrícolas en "Hispania" también. Después de una larga lucha contra los cartagineses, llamada las "Guerras Púnicas" (siglo III a. C.), Roma por fin derrotó al general Aníbal (¡el de los elefantes! ), y destruyó la ciudad africana de Cartago, así asegurándose del control del Mediterráneo. Ya habían invadido España cerca de Valencia (en el año 219 a. C.). Así comenzó la larga dominación ( ¡seis siglos!) de la Península Ibérica por los romanos.

La época romana...

Como sabes, el español deriva del latín, el idioma de los romanos. Fue la lengua de los negocios, y sobre todo, de la Iglesia Católica, y así de todo el aprendizaje y conocimiento del tiempo. Aparte del idioma, los romanos influyeron en los sistemas de agricultura que establecieron (latifundios, o villae, trabajados por esclavos), en la cría de ganado, y en el trabajo de las minas. Construyeron una impresionante red de calzadas para facilitar el transporte y la comunicación. También construyeron templos, circos, teatros (como el de Mérida), puentes, y acueductos para llevar agua (como el de Segovia). En el siglo III d. C. el cristianismo se adoptó como la religión del imperio, y tuvo en España mucho arraigo. Abundaban filósofos, autores, y poetas romanos que eran de España. Tal vez reconoces los nombres de Séneca (autor, filósofo, estoico), o el del autor Lucano, o el del poeta Marcial. Hubo cuatro emperadores hispanorromanos: Trajano, Adriano, Marco Aurelio y Teodosio el Grande.

Los "bárbaros del norte"...

La España romanizada sufrió todavía otra invasión en el año 400 d. C., esta vez no por la costa mediterránea sino del norte. Varias tribus germánicas conquistaron a la gente y se impusieron como los nuevos amos del territorio ibérico. La tribu principal se llamaban los visigodos. Así que sobre la civilización latina se agregó otro estrato de leyes y costumbres germánicas. La capital fue Toledo, y desde allí se creó un gobierno unitario, una monarquía aristocrática. Los visigodos practicaban la religión cristiana, pero tenían creencias diferentes de las romanas. Sin embargo, la cultura clásica prevaleció sobre la germánica y se continuó usando el latín como idioma. Se adaptó el sistema del latifundio a las necesidades prevalentes, y así se inició una forma de feudalismo en Españo, pero este sistema nunca llegó a ser una institución tan arraigada como en otros países de Europa.

Los árabes....

Antes de hablar de los famosos árabes y su influencia en España, es importante clarificar una cosa: el nombre que usamos para referirnos a ellos. Pueden ser "árabes", "musulmanes", o "moros" y su religión es el "Islam", proveniente del profeta Mahoma de Arabia. Para la época de la conquista de España, el Islam se había difundido por muchas de las tribus nómadas del norte de África, unificándolas en una civilización poderosa.

En el año 711, invadieron los primeros musulmanes y atacaron la monarquía visigoda. Pronto se apoderaron de la mayor parte del istmo. Se quedaron ocho siglos, no sin oposición de los españoles, que empezaron inmediatemente a "reconquistar" el país. Fue al principio una oposición de culturas muy diferentes -- en cuanto a la religión en especial-- pero a través del tiempo esa oposición terminó en una convivencia pacífica en muchos casos. La integración árabe-española de costumbres, arquitectura, de arte y de conocimiento del mundo creó una civilización de gran esplandor cultural, especialmente durante los siglos VIII, IX, y X.

El Alcázar, Sevilla

Cuando hablamos de la diferencia entre la historia de España y la del resto de Europa, hablamos principalmente de la influencia musulmana que prevalece hasta hoy día.

Como veremos, Córdoba fue la capital política y cultural, un centro de aprendizaje e intercambio entre el clasicismo y el orientalismo. Allí se fomentaba en un ambiente de mucha tolerancia el estudio de las ciencias, de la filosofía, de la medicina, de la botánica y de las matemáticas, lo que luego influyó en toda Europa. Vivían juntos judíos, árabes, y cristianos, reconociendo sus diferencias pero aceptándolas por lo general. Córdoba era una ciudad rica, lujosa. Aun cuando la unidad política sufrió debido a las invasiones de tribus árabes bereberes en el siglo XI, y España se dividió en pequeños califatos (o estados), la mezcla de culturas estaba bastante completa, y a pesar de grandes diferencias religiosas y culturales se había logrado una tolerancia excepcional. Esto se manifiesta en Sevilla, como vas a ver, uno de los centros más importantes de cultura árabe, con Córdoba y Granada. Bajo los musulmanes esta región se llamaba Al-Andalus.

La reconquista...

Por supuesto, los moros tuvieron más influencia y más poder en el sur, más cerca del sitio de su invasión original. Los pueblos del norte de España iniciaron una rebelión en contra de los musulmanes tan pronto como pudieron después de la toma inicial, y desde el norte los españoles fueron empujando a los invasores árabes más y más al sur. Cada región adoptó formas de resistencia propias, y así creció la individualidad lingüística y cultural de las distintas regiones. A medida que los españoles iban recuperando terreno de los árabes, la península se dividió en reinos independientes, desunidos y rivales. Sin embargo, poco a poco se formaron varios núcleos de poder, entre ellos Castilla-León, Aragón-Cataluña, Portugal, y Navarra, además de los "reinos de taifas" que eran el resultado de las divisiones políticas de Al-Andalus a principios del siglo XI y que todavía quedaban bajo dominio árabe.

Durante la Edad Media, se intensificó el cristianismo y se reforzaron las relaciones con el resto de Europa por medio del Camino de Santiago, una vía de peregrinación religiosa a Santiago de Compostela en Galicia, y así se intensificó también el deseo de los españoles de reclamar toda la península de los musulmanes. Ellos, por su parte, perdieron mucho de su poder defensivo aun en el sur (los cristianos reclamaron Sevilla en 1248). La ciudad de Granada era la última bastión árabe para 1469, fecha en que se casaron Fernando de Aragón con Isabel de Castilla. Este matrimonio representaba, en efecto, la unificación de gran parte de España bajo estos "Reyes Católicos". Los ejércitos de Fernando e Isabel entraron victoriosamente en Granada en 1492, y tomaron también el palacio de La Alhambra un poco fuera de la ciudad. Así terminó la Reconquista de España.

En el mismo año de 1492, se extendió el poder español en América con la llegada de Colón a la isla Hispaniola. En este año también se expulsó a los judíos de España, señal del cambio de actitud que sucedió durante los siglos de dominio árabe en la península.

Para repasar...

Siglo IX a. C.	Primeros contactos de fenicios y griegos en las costas penisulares.
Siglo VI a. C.	Llegada de los celtas a España. Fusión con los iberos
Siglos VI -III a. C.	Dominación de los cartagineses
Siglo III a. C. - Siglo I a. C.	Los romanos y los cartagineses luchan por dominio sobre España
Siglo I - Siglo V d. C.	Dominación de los romanos
Siglo III d. C.	El cristianismo llega a predominar en España
Año 409 d. C.	Llegada de los visigodos
Año 711 d. C.	Llegada de los árabes
Años 756 - 961 d. C.	Califato de Córdoba: Período de máximo desarrollo cultural
Año 1248 d. C,	Toma de Sevilla por los cristianos
Año 1469 d. C.	Matrimonio de Fernando de Aragón e Isabel de Castilla
Año 1492 d. C.	Expulsión de los moros de Granada; explusión de los judíos, llegada de Colón a América

 ¿Entendiste bien?

Para confirmar tu entendimiento, haz este pequeño ejericio.

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Quesada Marco, Sebastián. Curso de Civilización española. Madrid: Sociedad General Española de Librería, S.A., 1993

Ugarte, Francisco, y Michael Ugarte y Kathleen NcNerney. ESPAÑA y su civilización, 5ta edición. Boston: McGraw Hill, 1999.